Lebron James: el debate de las CABRAS.

En la noche de ayer, la ya leyenda viviente de los Lakers anotó 38 puntos para colocarse como el máximo anotador histórico de la NBA.

Ya llevaba semanas previéndose pero en el último partido contras los de Oklahoma,  “King” James superaba la marca de 38,387 del gran Kareem Abdul-Jabbar. Un récord más para una lista cada vez más larga de LeBron, que pone la guinda al pastel que han sido sus 20 temporadas como jugador. Este récord sirve para dar un golpe sobre la mesa importante en el debate de las CABRAS o GOATS (greatest of all time) del baloncesto.

El debate seguía abierto por el segundo puesto de mejores de la historia, en mi opinión, entre LeBron y el propio Kareem, la leyenda de los Lakers que promedió 24 puntos y 11 rebotes durante sus 19 años de carrera. Sin embargo, el debate por el primer puesto sigue abierto, puesto que Michael Jordan, a pesar de tener peores estadísticas anotadoras en total, consiguió algo que LeBron nunca conseguirá, y es no tener ni una sola derrota en unas finales de NBA. Más que la estadística en sí, el hecho de que Jordan nunca perdiera unas finales es una muestra de carácter y liderazgo, y por encima de todo habilidad, la habilidad de ponerte el equipo a las espaldas cuando las cosas se ponen duras. 

Para mí Lebron no ha demostrado esto al mismo nivel que Jordan, ni de la misma manera. Por eso LeBron es respetado y Jordan era temido; ahí está la diferencia. Lebron le da la enhorabuena a sus contrincantes y tiene amigos en otros equipos. Jordan enfadaba a sus contrincantes a propósito para que sacasen lo mejor que llevaban dentro, y después los pulverizaba para que el rival supiese que ni a su mejor nivel podía con Jordan.

Para cuando LeBron se retire, que queda un rato puesto que recientemente dijo en una entrevista que quería jugar con su hijo Bronny nacido en el 2004, entonces volveremos a abrir este complejo debate con tantas opiniones, y con las estadísticas sobre la mesa, veremos si el “Rey” se podrá coronar como CABRA de la NBA.

“LeBron jamas será Jordan ni aunque haga Space Jam”. Midas Alonso